Manualidades para la cocina

Tengo un montón de trastos de pequeño tamaño sueltos por la cocina y luego cuando los necesito nunca los encuentro. Son cortapastas, esencias, colorantes, boquillas de manga pastelera..., vamos de todo un poco. Y para colmo cuando estuvimos en Málaga compré un montón de especias en una tienda de esas al peso que te las sirven en una bolsita de plástico.

Por otro lado tengo un montón de tarritos de potitos que consume mi niña así que junté las dos cosas y me puse a buscar por la red como decorar tarros para que las tapas no fueran esas horrendas con la marca del producto y encontré el decoupage que es decorar cosas mediante servilletas de papel bonitas para luego barnizar y quede todo completamente integrado.

Así que aquí está el resultado. Los he utilizado para guardar especias, orejones, pasas, ciruelas pasas, sésamo, pipas peladas...

Y puestos a hacer manualidades seguí decorando una caja de galletas danesas, la típica caja azul metálica que siempre utilizamos en casa para guardar trastos, sobre todo como caja de costura.

Yo la he utilizado para meter los colorantes y esencias:

Otra caja que tenía por casa, esta vez era roja y de una colonia que nos trajeron los Reyes la he reconvertido para guardar infusiones. 

También he decorado los tarros de la leche de fórmula que toma la niña. Este en particular, lo he utilizado para guardar anís estrellado.

Para organizar los cajones de la cocina compré unos cuberteros de plástico blanco en el IKEA que siempre están todo negros de rayones así que les he cambiado el color.

Tengo pendiente encontrar otra caja para meter los cortapastas y las boquillas de la manga pastelera.